miércoles, 19 de febrero de 2014

¿Qué escuela queremos para la sociedad en la que vivimos?


Reflexión sobre la conferencia de Tonuzzi

Respecto a esta pregunta podemos contestar varias respuestas y, además, deberíamos pensarlo seriamente ya que nosotros tenemos que encontrar una que nos ayude como futuros maestros. Para poder encontrar una buena respuesta podemos guiarnos con la conferencia de Francesco Tonuzzi.
Uno de los principales  problemas que vemos es que la escuela de hoy no es buena para mañana. Este se encuentra en varios países y hace pensar que la educación no puede ser  la misma en todos, ya que está se tiene que adaptar a la situación política, social, crisis, etc, de cada país.
Otro punto de que debemos destacar es que no se puede comparar la escuela de antes con la de ahora. Antes los niños estaban acostumbrados a ver a sus padres leer, escribir, ir a exposiciones, a teatros...También eran unos grandes aliados para la escuela ya que creían fuertemente en sus castigos y pensaban que si al niño lo castigaban era porque lo merecía y lo necesitaba para corregir su comportamiento.
Con la llegada de la democracia todos los niños tenían derecho a recibir una educación. Para que la escuela fuese un buen ejemplo tendría que tener diversidad, es decir, que todos los niños pudiesen asistir a ella y que todos tuviesen las mismas posibilidades. Por ello, las escuelas tendrían que ser públicas ya que a raíz de las escuelas privadas se crea una élite y los niños son estrictamente seleccionados para entrar en ellas.
Una de las principales funciones que tiene la escuela es que debería cambiar porque en la actualidad no le gusta a nadie. Las familias, incluso, siempre han sido unos grandes aliados para la escuela pero ahora se posicionan siempre al favor del niño y lo sobreprotegen mucho.
Para solucionar este problema la escuela debería ser para todos y que la familia vuelva a tener un papel activo en ella. Para ello, debe aumentar las bases culturales, tiene que ser un lugar bonito y acogedor, en el que se consulten libros, se escuche música y, en definitiva, que sea igual de agradable que sus propias casas porque en ella pasan mucho tiempo. También es muy importante que haya estímulos para que los niños se sientan motivados.
Por otro lado, es importante que la escuela escuche a los niños  y sus necesidades para que así los profesores se adapten a ellos. Además, la escuela los tiene que reconocer como ser capaces y seguros de llegar a los objetivos que se proponen. No nos podemos centrar en que los niños tengan buenos resultados intelectuales sino que también demuestren sus habilidades respecto trabajos manuales, dibujos creatividad...Una buena solución sería que cada escuela estuviese dividida por talleres y que cada niño descubriera en cual de ellos se desenvuelve mejor.
También debemos destacar el papel de los gobiernos porque cada vez que llega un partido al poder intenta cambiar la situación respecto a la educación y para ello utilizan nuevas leyes que lo único que hacen es confundir a los profesores porque les cambian los criterios de evaluación, las asignaturas, los horarios, etc. De lo que verdaderamente se deberían preocupar no es de mejor a través de leyes sino preocuparse por la formación de los docentes ya que si hay buenos profesores, habrá buenas escuelas.
Por último, en tiempos de crisis, nosotros como profesores tenemos que ver cuales con las preferencias y las motivaciones de los niños porque si trabajan en lo que ellos quieren serán muchos más felices. No podemos centrarnos en lo que nosotros queremos que sean sino que ellos sean lo que quieran.

Como conclusión podemos decir que respecto a las leyes lo que estamos haciendo en retroceder ya que con la llegada de la LOMCE estamos volviendo a poner sistemas en la educación como los de hace 40 y 50 años y, por tanto, así no se puede mejorar. También cada niño tiene que ser bueno en algo y nosotros como maestros tenemos que ayudarlos y hacerles ver lo que de verdad le gusta. Además, tenemos que preocuparnos si de verdad nosotros queremos cambiar la escuela y si tenemos o no recursos para hacerlo. Por último, es muy importante destacar que los niños deben aprender a investigar y no solo apoyarse en verdades.